Con una ubicación envidiable dentro de la exclusiva urbanización Punta Brava, esta parcela de 2.578,5 m² ofrece unas impresionantes vistas al mar Mediterráneo que se extienden hasta donde alcanza la vista. La orientación del terreno garantiza sol durante todo el día, creando una atmósfera luminosa y acogedora en cualquier proyecto que se desarrolle.

Más allá de su belleza natural, el terreno presenta una orografía con una pendiente media del 49%, un factor que condiciona la superficie máxima ocupable, limitada al 20% de la parcela (343,80 m²). Esta regulación garantiza que cualquier edificación mantenga una integración respetuosa con el paisaje y la privacidad del entorno.

La normativa urbanística permite una edificabilidad total de hasta 687,6 m² distribuidos entre planta baja y primera planta. Además, la planta sótano (planta -1) no se contabiliza dentro de este límite, lo que ofrece aún más flexibilidad. También existe la posibilidad de construir una o dos viviendas, adaptándose a distintos estilos de vida o proyectos familiares.

Este terreno no solo representa una oportunidad para edificar un hogar a medida, sino también el reto y el privilegio de hacerlo con criterio arquitectónico, respeto por el entorno y la voluntad de crear una obra que se integre de forma natural en uno de los paisajes más preciados de la Costa Brava.